Mercado: situación en Febrero 2023
Enero ha sido un mes con un comienzo caótico y un final alocado en el consumo de carne de conejo. Los precios han mantenido una cierta estabilidad a pesar de las fuertes fricciones que se han ido sucediendo a lo largo de las semanas.
Desde la desesperación por parte de los cunicultores por ver retrasos en la recogida de las canales con el fuerte incremento de consumo de pienso que se da en estas fechas agravadas por la ola de frío -que ya tocaba- con el resultante aumento de costes alimentarios generado. A ello, y sobretodo en la zona mediterránea, se han unido a descuentos por la entrega de gazapos con pesos elevados para el estándar mediterráneo y que las tiendas devuelven al ver estas canales tan grandes.
Posteriormente y en pocas semanas se ha pasado a una recogida de todo lo que se mueva en la granja, prácticamente sea cual sea el peso y una desesperación de centros de sacrificio para conseguir más canales, circunstancia que en algunos casos ha sido casi de risa por ofertas sobre la mesa de 15cts por encima para todo el año y, incluso en un par de casos de hasta 25cts de prima por entregas de 500 gazapos semanales.
La situación seria casi cómica si no fuera por lo serio de la cuestión, en que en algunos casos han agotado totalmente las cámaras de conejo congelado, cotizándose en algunos casos hasta por encima de las canales de conejo fresco.
Sin embargo la situación no es tan bonita como parece, pues los márgenes en las instalaciones cunícolas no son precisamente muy halagadores y en los centros de sacrificio estamos en la misma situación, casi con total seguridad por la disminución de canales que sacrifican, que repercuten en un aumento de los costes de tal forma que algunos centros de sacrificio están en pleno concurso de acreedores o a punto de estar en ellos (recordemos que un concurso de acreedores es lo que los más grandecitos llamábamos suspensión de pagos).
Todo ello en un entorno donde la inflación del año 2022 ha alcanzado el 5,6%, es decir, necesitamos un 5,6% más de ingresos para vivir en mismo ritmo de vida, y eso sin contar la inflación por alimentos ni energía. La verdad es que no entiendo que España haya sido del 5,6%, mientras que Alemania del 9,6% y la Eurozona del 9,2%, estando España el país que menos ha inflación a sufrido.
La presencia de problemáticas sanitarias crónicas es cada vez más frecuente y a nivel general está repercutiendo en una irregularidad en las entregas de animales que se suma al cierre de granjas que, como cada año, es un goteo pequeño pero incesante y que abarca a toda la península, con frecuentes disminuciones de censo para adaptarse mejor a los costes.
En otras especies ganaderas la situación tiene otros tintes, ya que en Porcino se ha disminuido un 10% el sacrificio de animales durante el 2022, pero debido sobretodo a la presencia de una variante del PEARS, denominada Rosalía, que está diezmando los lechones en las granjas afectadas y produce una carencia de animales para el sacrificio que está repercutiendo en un precio sostenido.
La avicultura, producción ganadera junto a la de huevos que son el refugio cárnico de los consumidores cuando no se llega a final de mes, han aumentado ligeramente su consumo. Curiosamente, las legumbres que son otra fuente de recursos alternativa a las carnes, han sufrido unos descensos de consumo sumamente importantes (27% en Judías y 14% en garbanzos).
En materias primas tenemos una situación relativamente confusa pero con signos que quiera ir hacia un ligero descenso a lo largo de los próximos meses.
Durante el fín de año pasado las provisiones de cereal internacional sufrieron aumentos importantes que poco a poco se ha estabilizado, sin embargo vuelve a observarse una retención de mercancía en el mercado que no permite recuperaciones a la baja de las cotizaciones de cereal a corto plazo.
Esto se une a que las cosechas de cereal en España no han sido muy abundantes, por lo que en estos momentos impera más el asegurar el enlace con la próxima campaña con garantías de poder llegar, situación difícil si no llegan más cereal de importación que cubra esta falta de cereal.
La soja por las nubes debido a las reducciones en las cosechas de algunos países como Argentina, donde se perdió el 26% de la cosecha por las olas de calor extremo.
En el apartado de materias primas específicas de cunicultura, es decir las materias fibrosas, se espera estabilidad durante febrero y bajadas, esperemos que significativas, para el mes de marzo.