¿Pero qué es el conejo para una producción peletera?
Granges Can Rafel tiene una amplia y dilatada historia que comenzó en 1948, cuando nadie sabía lo que era la producción de conejos de carne.
Joan Freixer, por entonces, empezó con 8 reproductoras y 1 macho, los cuales pudo adquirir gracias al premio en metálico que recibió al ganar una carrera de bicicletas en una población próxima, Campdevanol, en una época donde, o bien los conejos eran muy caros, o se pagaba mal en las carreras ciclistas.
Así fue aumentando poco a poco pasando a 36 conejas en 1956 y 45 en 1963 aumentando conforme la demanda de conejos subía y adecuando la instalación. Pero el gran salto de esta innovadora empresa la realizó en 1981 que se dedicaron a la cría de razas puras traídas de Alemania entre ellas el neozelandés, una raza que aportó una gran mejora sobre las estirpes locales por sus índices reproductivos.
Ante el estancamiento de la carne de conejo, Félix, decidió redireccionar su empresa hacia la peletería
También criaron mariposas, leonados de borgoña, etc. para aptitud cárnica que en aquellos tiempos se valoraron muchísimo. Siguiendo esta línea de desarrollo en cunicultura, en 1986 pasaron a ser multiplicadores de la línea Caldes del Irta desarrollando posteriormente las líneas genéticas propias HYCAT en el 1993.
Por estos tiempos ya hicieron sus primeros pasos en el mundo de las chinchillas, animales de aptitud peletera que desarrollaron durante 18 años y que finalmente decidieron relegar por el impulso que la línea reX de conejos de piel estaba adquiriendo, tomando la decisión en el 2005 de dedicarse de lleno a la producción de reX.
Granges Can Rafel cría principalmente la raza rex, pero hay otras variedades de mucho interés por la calidad de su piel, como por ejemplo el satín
¿Por qué la empresa se decantó por la línea REX?
«El conejo en estos momentos tiene tres campos posibles de negocio: la carne, la piel y el pelo. La carne como tal, opino que está estancada con un futuro incierto. El pelo de angora no ha tenido un interés producirlo en Europa porque se importaba de China, aunque actualmente se observa un creciente interés por la producción europea de este tipo de pelo. Las empresas peleteras están cambiando sus planteamientos y buscando opciones como la de REX, con una menor presión por el origen de las pieles, pero necesitando una trazabilidad que sólo se puede conseguir en Europa.
La raza REX es una línea de conejos con una piel“Por ello es un mercado en estos momentos en de muy alta calidad, su pelaje tiene una sensación clara curva ascendente y de futuro para los al tacto más suave que el visón y casi comparable a la próximos años».
El conejo REX ofrece una producción muy rentable, por un lado, carne de buena calidad y por otro, una piel excelente.
Las producciones son interesantes, ya no son aquellas conejas que apenas tenían nacidos en los partos con baja fertilidad, sino que ahora son animales seleccionados con altas tasas de natalidad y fertilidad que permiten un enfoque industrial del producto.
Nos recalcan que a pesar de ser muy similar el manejo del conejo industrial al que estamos habituados, siempre hay pequeñas diferencias y por ello, recomiendan adentrarse en este negocio de forma tranquila, poco a poco, reaprendiendo y compaginando la producción cárnica con estos animales y así ir creciendo paulatinamente, sin querer abarcar más de lo que se puede.
Las granjas de conejo REX diversifican su producción ofreciendo tanto carne como piel, adaptándose mejor a las fluctuaciones del mercado
No es lo mismo 1000 conejas reproductoras híbridas comerciales que 1000 conejas reX para peletería. el trabajo se multiplica pero, evidentemente la rentabilidad es muy diferente. Con 100 reproductoras se obtienen un nivel de beneficios muy interesante, y aunque representan trabajo diario, no es como la producción cárnica que desconoces el precio al que te valorarán los conejos.
En peletería el precio es más estable a lo largo del año con las fluctuaciones estándar, teniendo más importancia la calidad de la piel conseguida que no las fluctuaciones. Una de las premisas a tener en cuenta es la estacionalidad de la producción, que no la venta de piel, ya que en el periodo entre abril y septiembre la piel conseguida es de baja calidad por la temperatura a la que están los animales.
Ello no quiere decir que la producción baje a «0», sino que es el momento de retirar las conejas menos productivas o con un insuficiente estado corporal y renovar con animales que estén perfectamente sanos pero que tendríamos que esperar demasiado tiempo para que su piel fuera de calidad por el efecto temperatura.
La edad de sacrificio suele ser superior al conejo estándar, a partir de lo150 días, dependiendo de la época de nacimiento y temperatura a la que están ubicados, alcanzando la calidad de la piel tanto por madurez de ella como por las temperaturas, siendo por tanto necesario revisar periódicamente los animales buscando la máxima calidad. Esto es importante debido a la gran diferencia de calidad y sus cotizaciones dependiendo de ellas, que justifica sobradamente el revisar los animales uno a uno buscando en el momento del sacrificio que estén en el óptimo estado de la piel.
El trabajo supletorio tiene una recompensa muy elevada en la calidad de la piel y por ende la valoración que nos harán de ellas. Aquí es donde uno podría ver fantasmas, en la calidad de la piel. ¡siempre me lo van a valorar mal!
Sin duda es la gran cuestión que se da por sentado, que el comprador tiene potestad de decidir. pues no es así.
La calidad de la piel las valora habitualmente un experto que revisa todo el lote de pieles clasificándolas según unas pautas ya determinadas que dependen de la propia industria peletera. Es evidente que cuesta un dinero, pero esta valoración es independiente y reconocida, pudiendo luego negociar con conocimiento y datos perfectamente reconocidos por todos los implicados.
Una de las principales diferencias entre el mercado de la carne de conejo y el de la peletería es el ámbito de trabajo. La carne de conejo se consume principalmente en España, Portugal, Francia e Italia, pudiendo sumar Malta, Egipto, Grecia, y otros países, pero realmente el consumo total es bajo en ellos, mientras que la peletería es un mercado de ámbito mundial.
El mercado de la piel es muy amplio, y a pesar de seguir las tendencias de la moda, tiene una cierta estabilidad en el consumo.
La piel de conejo que hasta estos momentos ocupa un ínfimo espacio del mercado -pieles de lobo, coyote, zorros, visones, marmotas, martas, etc.- está mostrando un fuerte potencial debido a la percepción positiva de que la carne es consumida, al igual que el cordero, vacuno, etc.
Esto da lugar a una percepción más útil del producto y a un gran interés en estas pieles por parte de la industria de la moda, que ya empiezan a contemplar con gran atención el producto, pasando de un desconocimiento total a una valoración positiva como piel a tener en cuenta.
La producción de conejos reX es perfectamente compatible con una granja de producción cárnica convencional, siendo quizás la mayor diferencia las necesidades de alojamiento de los animales que deben permanecer más tiempo en la instalación y que para evitar devaluaciones de la piel por mordiscos se deben ubicar en compartimentos independientes o individuales a cada animal.
Las instalaciones son las mismas, de hecho, pueden convivir al mismo tiempo sin ningún problema. Es evidente que la calidad de la piel es básico para obtener una buena cotización y para ello es cuando aparecen las pequeñas diferencias de manejo que estamos comentando.
Por ejemplo las enfermedades de la piel son un verdadero problema, entre ellas las micosis (tiña), que estropean totalmente la piel aunque a menudo a simple vista no se aprecian los problemas en animales vivos, pero cuando se observan pieles curtidas aparecen manchas que devalúan totalmente la piel.
A misma situación encontramos con los mordiscos, a pesar de que se recupere el pelo, en la piel siguen observándose las marcas del mordisco. Enfermedades como estafilococia, pasteurelas, etc. afectan directamente a la piel, pero afecciones colibacilares provocan una baja calidad de esta.
En estos momentos un grupo de alrededor de 200 reproductoras ya se podría tener en cuenta como una empresa rentable con sus beneficios a final de año, sin embargo hay que tener en cuenta que una granja a nivel de mar y clima caluroso seguramente tendría más inconvenientes en obtener pieles de primera calidad.
La gama de mutaciones para trabajar es muy amplia, pudiendo hablar de una piel rex castor, muy valorada e introducida en el mercado o apostar por rex chinchilla, una de las más valoradas y apreciadas del mercado pero que tiene más dificultades en su manejo, o mutaciones como el Opal o Habana, o muchas otras que en estos momentos no hay producción y por tanto tienen un mercado potencial muy amplio ya que en todo el mundo prácticamente no se produce.
En el mercado de la moda la complejidad de los diseñadores hace que exista una gran demanda de pieles diferenciadas de tal modo que son capaces de confeccionar combinaciones totalmente nuevas con pieles de color diferenciadas de tal forma que toda tonalidad de piel determinada siempre tiene su mercado.
Evidentemente no es sencillo buscar el cliente de las pieles final, por ello GRANGES CAN RAFEL, que con sus 1500 reproductoras únicamente tienen cubierto el mercado de dos tipos de tonalidad de la piel, nos comentan que quieren abrir y participar al sector de la posibilidad de producir pieles.
Sus necesidades de pieles son muy amplias y están dispuestos a traspasar esta necesidad a granjas que puedan tener interés en producir estas pieles y ellos comprarlas para abastecerse y suministrar al mercado.
Hay un gran interés en el mercado siendo tan grande el camino a recorrer en la piel que tenemos muchos años de crecimiento por delante, siendo necesario el poder ampliar la oferta de pieles y sobretodo, tonalidades, para que el mercado tenga más dinamismo e ir abriendo de forma más afianzadora el mercado.
Nos reafirma Félix Freixer que tal como se está situando la producción cárnica con unos márgenes reducidos, la opción de la peletería con el complemento de la carne permitiría a muchas explotaciones dar un giro importante en su futuro y abrir una puerta de viabilidad que ahora está muy mermada