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Protocolo de actuación frente a una ocupación ilegal de una granja particular

La legislación Europea requiere unos requisitos muy elevados de seguridad alimentaria y trazabilidad de los productos así como del bienestar y la salud de los animales.

La entrada de personas NO autorizadas a las granjas ganaderas representa un elevadísimo riesgo para la salud y bienestar de los animales así como una grave alteración de estos requisitos de seguridad alimentaria y trazabilidad de los alimentos que aporta una granja al consumidor europeo.

Por ello, y ante esta grave infracción en la seguridad alimentaria y en el bienestar de los animales  así como de los riesgos sanitarios que conllevan, hay que proceder con mucho cuidado en estas situaciones.

Lo primero es mantener la calma, lo cual es francamente difícil. Habitualmente y según constatan algunas granjas afectadas, algunos de estos teóricos defensores de los derechos de los animales buscan la confrontación con el propietario, que ante los nervios de ver una propiedad privada invadida y en ocasiones saqueada y con graves destrozos económicos. Sin embargo casi siempre es una minoría la que buscan confrontación y habitualmente la mayoría simplemente buscan notoriedad para una causa determinada.

En estos casos los animales sufren un estrés muy grave y si además ven al cuidador-propietario nervioso se contagian muy fácilmente del nerviosismo perjudicando aún más los animales, que reconocen los estados de ánimo de los cuidadores con gran facilidad.

Llamar inmediatamente al 112 o 062, ya que es la autoridad pertinente para acudir a la granja y proceder a identificar a los ocupantes de la propiedad privada.

Se recomienda asimismo avisar a los responsables de los sindicatos agrarios para que nos acompañen en este proceso y nos aporten tranquilidad y una visión más general del problema así como poder tener una cara amiga al lado cuando uno se siente ultrajado.

Obtener todas las pruebas documentales de los ocupantes no autorizados, como por ejemplo fotos, videos, datos de vehículos, así como fotografiar y dejar constancia de los daños directos (rotura de vallas perimetrales, puertas, instalaciones) así como de los actos de robo que se puedan cometer en esta ocupación ilegal. Toda esta documentación se debe entregar al cuerpo policial, pero siempre guardándose copia por si acaso. Nunca hay que subir estos documentos a foros ni redes sociales.

Hay que tener claro que el código penal contempla la usurpación (ocupación indebida de una propiedad privada en contra de la voluntad del propietario) y el robo (ya sean de animales o otros bienes de la explotación) así como los daños producidos expresamente en esta ocupación que se podrían valorar como vandalismo.

Aparte de ello también hay una normativa muy estricta en cuanto al transporte de animales en cuanto a documentación y bienestar y además las manifestaciones sin comunicación previa también conllevan sanciones.

Para los efectos a posteriori de estas actuaciones ilegales en cuanto a la salud de los animales lo idóneo es la visita de veterinarios privados y oficiales para que puedan levantar las actas necesarias  y/o certificados veterinarios donde los daños posteriores por el estrés producido puedan ser debidamente documentados.

Para evitar problemas legales en estos casos, hay que tener claro que:

  • La puerta exterior SIEMPRE debe estar cerrada.
  • Los letreros de sanidad controlada deben estar visibles y tenerla documentada.
  • La valla perimetral tiene que estar en buenas condiciones.
  • Presencia de letreros de Prohibido el Paso visibles.
  • Avisar a la Policía si se han observado señales previas de visitas nocturnas.
  • En caso de tener perros guardianes, asegurarse que estos estén debidamente documentados y entren en el seguro de la granja.

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Oriol

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