Legislación

Unidad de Coordinación del Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos

Escrito por Osmayra Cabrera

La resistencia a los antibióticos plantea un gran desafío en la Unión Europea (UE) y en el mundo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la resistencia a los antibióticos ya ha alcanzado niveles alarmantes en muchas partes del mundo.

Entre las iniciativas mundiales, se hallan la Declaración Política de las Naciones Unidas de 2016 sobre la resistencia a los antibióticos y el Plan de Acción Mundial de la OMS de 2015 sobre la resistencia a los antibióticos, que adoptaron posteriormente la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). [registrados] Los antimicrobianos también se han abordado en foros como el G-7 y el G-20.

Resistencia a los antibióticos

La resistencia a los antibióticos ya comporta una pesada carga social y económica y se estima que es responsable de 33.000 muertes al año solo en la UE y de más de 700.000 muertes al año en todo el mundo.

Hace unos años la UE se pronunció sin demora para reconocer la importancia de la lucha contra la resistencia a los antibióticos, como pone de manifiesto la Estrategia comunitaria contra la resistencia a los antibióticos de 2001.

En junio de 2017 se ha publicado el nuevo Plan de Acción de la UE sobre resistencia a los antibióticos, que tiene como pilares fundamentales: hacer de la UE una región modelo en materia de buenas prácticas, impulsar la investigación, el desarrollo y la innovación para colmar las lagunas de conocimiento actuales e intensificar los esfuerzos de la UE, que destaca por su enfoque «Una sola salud», el cual aborda la resistencia a los antibióticos tanto en humanos como en animales.

PRAN –Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos–

Tanto el antiguo, como el nuevo Plan de Acción Europeo constituyen un símbolo del compromiso político, fomento de medidas en los Estados miembros y cooperación internacional.

En 2014 y desde la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) se impulsó la creación de un Plan estratégico y de acción para reducir el riesgo de selección y diseminación de resistencias a los antibióticos, movilizando a todos los profesionales involucrados y dando cumplimiento al requerimiento de la Comisión Europea. Es por ello que se creó el Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN).

El PRAN se encuentra en el inicio de la segunda edición (2019 – 2021). En él forman parte más de 300 expertos españoles de la salud humana y la sanidad animal y que son representantes de las instituciones participantes: ocho ministerios, todas las comunidades autónomas, representantes de sociedades y asociaciones científicas y profesionales, laboratorios de referencia, plataformas profesionales, expertos externos, así como universidades y organizaciones colegiales y que trabajan en conjunto y en consonancia con Europa.

El nuevo plan (2019 – 2021) se estructura de la misma forma, destacando como prioridades en materia de sanidad animal lo siguientes puntos.

  • Mejorar la vigilancia del consumo de antibióticos veterinarios y de resistencias a los antibióticos e implementar
  • Consolidar los programas de reducción del uso de antibióticos en las principales especies animales del ámbito nacional

VIGILANCIA DEL CONSUMO – VIGILANCIA DE RESISTENCIAS

La vigilancia del consumo en salud animal se lleva a cabo mediante el proyecto ESVAC (European Surveillance of Veterinary Antimicrobial Consumption), que realiza un análisis anual de las ventas nacionales de antibióticos veterinarios. Este análisis, junto con el del resto de países miembros, se presenta en un informe anual de ventas a nivel europeo.

España, en el último informe ESVAC, publicado en octubre de 2019 y correspondiente a las ventas de antibióticos veterinarios en 2017, presentó un consumo total de 230 mg/PCU siendo el cuarto país con más alto nivel de ventas.

A pesar de esta posición en el ranking europeo, se observa un esperanzador descenso en las ventas totales de antibióticos del 46% desde 2014 (año de inicio del PRAN), además destaca el descenso individual de las ventas de tetraciclinas, macrólidos y sobre todo colistina que ha sufrido una reducción de su consumo total del 89% desde 2014.

Actualmente los datos correspondientes a las ventas de antibióticos veterinarios en 2018 están en proceso de validación, pero las cifras iniciales estiman un consumo total de 190 mg/PCU que significaría un descenso del 55% en el consumo total de antibióticos con respecto al año 2014 (año de inicio del PRAN).

Con respecto a la vigilancia de resistencias microbianas, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) y el Centro Europeo para el Control de enfermedades (ECDC), por encargo de la Comisión Europea, recopilan y analizan cada año la información de todos los Estados Miembros en relación a las zoonosis.

Cada país miembro debe enviar un informe sobre la situación en su territorio.

Los resultados, teniendo en cuenta los perfiles de multirresistencia, nos sitúan entre los 10 países con mayor número de cepas multirresistentes para las especies bacterianas analizadas y sobre todo en los sectores del pavo y el cerdo.

El ejemplo del SECTOR PORCINO y la COLISTINA

2013

La Agencia Europea del Medicamento (EMA) había recomendado realizar un uso responsable de la colistina en animales y limitar su uso sólo a animales enfermos y nunca como preventivo o profiláctico. Además remarcó la importancia de establecer un adecuado sistema de vigilancia de resistencia a este antibiótico y controlar su uso en animales en función de la situación.

2016

El 27 de Julio de 2016, la EMA (European Medicines Agency) publicó el documento sobre el uso de colistina en la Unión Europea, donde establecía un umbral máximo de uso de 5 mg/PCU, que deberían alcanzar los Estados Miembros en un periodo de tres años; siendo deseable llegar a 1mg/PCU.

En consecuencia, el 15 de septiembre de 2016 se reunieron en la sede de la AEMPS, representantes de las asociaciones nacionales de veterinarios y profesionales del sector de producción porcina para crear el denominado Acuerdo para la Reducción Voluntaria del Consumo de Colistina en el Sector del Ganado Porcino de España.

Las asociaciones se comprometieron a difundir el acuerdo y concienciar al sector sobre la problemática relacionada con el uso inadecuado de la colistina. Además prestaron toda su colaboración para la creación del PROGRAMA REDUCE COLISTINA y su difusión.

Los objetivos principales del acuerdo fueron reducir el consumo de colistina en producción porcina con el objetivo cuantitativo de 5 mg/PCU en el periodo máximo de tres años así como, controlar el consumo alternativo de antibióticos, evitando el aumento del consumo de neomicina y/o apramicina como posible sustitución a la colistina.

79 empresas se han adherido y cumplido el Acuerdo, lo que supone más del 80% de la producción de porcino a nivel nacional; los datos aportados hasta la fecha corresponden con el año 2015, 2016 y 2017 y 2018.

Se puede observar que el consumo de colistina ha disminuido un 97% desde 2015 a inicios de 2019.

  • El consumo de neomicina (posible alternativa al uso de colistina) también ha sufrido un notable descenso y el consumo de apramicina (posible alternativa al uso de colistina) se ha mantenido relativamente constante, con un pequeño aumento, lo cual indica que se debe mantener la vigilancia de su consumo.
  • Desde el inicio del Acuerdo para la Reducción Voluntaria del Consumo de Colistina, la implicación del sector ha sido total, constante y voluntaria; esto ha supuesto una difusión masiva de la problemática que rodea al uso de la colistina en España y una concienciación muy importante de las empresas productoras que se ha traducido, en una numerosa adhesión al Programa Reduce Colistina.
  • Las empresas adheridas al acuerdo están mejorando la gestión de sus programas sanitarios enfocándolos a un uso prudente de colistina y evitando el uso alternativo de neomicina y apramicina.
  • Se está mejorando la bioseguridad y la higiene de las explotaciones y se está enriqueciendo el manejo de los animales más susceptibles de sufrir enfermedades infecciosas tratables con colistina, como los lechones y los cerdos de cebo.

RETOS y AVANCES en los Sectores de Producción Animal en España

A la luz del éxito obtenido con el Acuerdo del Sector Porcino y tras evaluar el estado del resto de sectores en cuanto al consumo de antibióticos tanto de forma cuantitativa como cualitativa, en el marco del PRAN se han acordado, con los representantes de los principales sectores de producción animal la creación de Acuerdos de colaboración para Reducir el uso de los Antibióticos.

Estos Acuerdos facilitan la inclusión de los sectores en los “Programas Reduce”.

Las finalidades del Acuerdo son, primordialmente, reducir el consumo total de antibióticos, definir e implantar pautas de manejo y tratamiento con base científica de cara a realizar un uso más racional de los antibióticos y evitar la proliferación de las RAM y servir de ejemplo y de experiencia para otras ganaderías.

El sector de la cunicultura creó su propio programa reduce hace unos meses y hasta la fecha, 13 empresas además de las asociaciones AVECU, ASESCU e INTERCUN, han suscrito el Acuerdo para Reducir el Uso de los Antibióticos en Cunicultura (ARAC).

El objetivo principal de esta alianza es fomentar el uso racional de los antibióticos y plantear planes sanitarios preventivos que permitan la reducción del uso de los antibióticos. Los objetivos específicos más destacados:

  • Reducir un 30% el consumo de antibióticos en un período máximo de dos años.
  • Seguir las buenas prácticas establecidas en el texto del acuerdo en relación a maternidades, peridestete, piensos de retirada, colistina y oxitetraciclina.
  • Determinar los mejores antibióticos para cada patología.

Este Programa Reduce durará 2 años, tras los que se revisarán los logros conseguidos. Durante los meses que lleva en activo el programa de reducción se han observado una serie de circunstancias.

Del 100% del pienso que se consumía en 2015 en cunicultura, aproximadamente un 80% era medicado; en las explotaciones adheridas al acuerdo se ha detectado que desde esa fecha se ha disminuido el uso de pienso medicado a un 45 % con respecto al total de pienso consumido (datos de primer semestre 2019).

En general se ha observado un considerable descenso del consumo de todos los antibióticos individualmente, destacando también el descenso de la clortetraciclina.

El uso de más de una premezcla se está limitando radicalmente con gran esfuerzo por parte del sector y quedando reducido al punto específico del peridestete en el que se refleja que dada la altísima incidencia de Enteropatía Epizoótica Mucoide (todavía de etiología desconocida), se puede establecer una metafilaxis precoz con máximo dos antibióticos vía pienso.

Es importante destacar los compromisos que tienen que adoptar los diferentes integrantes del acuerdo, ya que el sector es multidisciplinar y sin una implicación total no se llegará a los objetivos.

Las asociaciones deben proporcionar información y formación a los veterinarios sobre la importancia de las RAM y medidas que se pueden instaurar en las explotaciones para reducir la necesidad de uso de los antibióticos; además de fomentar entre sus socios la adhesión.

 

El ganadero como responsable de la explotación debe designar al veterinario o veterinarios responsables de las prescripciones en su explotación y no utilizar más medicamentos que los prescritos por los veterinarios responsables; así como estar dispuesto a ser asesorado y mejorar en lo posible la gestión, el manejo y la bioseguridad de la explotación.

El veterinario debe seguir las pautas de “buenas prácticas” específicas para la prescripción de antibióticos con el fin de conseguir el objetivo marcado.

El seguimiento del Programa se lleva a cabo a través de la Unidad de coordinación del PRAN, proporcionando información y formación a los implicados.

Para finalizar es necesario destacar la inestimable implicación que están mostrando los veterinarios para conseguir una mejora de la producción y de las explotaciones, mediante un trabajo basado en el uso prudente de los antibióticos y la prevención del desarrollo de resistencias.

Esta implicación es necesario que esté apoyada por la administración a nivel de Comunidades Autónomas, de esta forma se podrán poner en marcha una serie de medidas urgentes y coordinadas a nivel local, nacional e internacional y que impliquen el compromiso de diversos sectores como los de la medicina, la sanidad animal, la agricultura, la economía, la sociedad y el desarrollo, para lograr la lucha contra la resistencia a los antimicrobianos y así garantizar el acceso a antimicrobianos eficaces y promover su uso responsable.

Por último es necesario recordar que todas las acciones que se lleven a cabo en relación con la resistencia a los antimicrobianos deben basarse en el concepto “Una sola salud”.

[/registrados]

Acerca del autor

Osmayra Cabrera

Dejar un comentario