En condiciones comerciales, los dos principales métodos para aturdir conejos destinados al consumo humano son el aturdimiento eléctrico (más utilizado) y el aturdimiento mecánico.
Tanto el aturdimiento eléctrico como el aturdimiento mecánico implican la sujeción e inmovilización individual del animal antes del aturdimiento, lo que comporta una fuente de estrés y un riesgo para el animal y el operario si no se hace adecuadamente, lo cual se incrementa cuando se trabaja con velocidades de sacrificio elevadas.
Por otro lado, el aturdimiento con dióxido de carbono (CO2) es un método muy utilizado en cerdos y aves (en este caso a bajas concentraciones o combinado con otros gases), que permite el manejo de los animales en grupo.
Esto reduce el contacto entre el hombre y el animal consciente y puede disminuir el estrés pre-sacrificio (Velarde et al., 2000).
En este sistema de aturdimiento, los animales se exponen a una concentración de CO2 elevada o a una mezcla de gases predeterminada (dentro de un pozo o a través de un túnel).
En comparación con la electronarcosis (sistema eléctrico posicionado solo en la cabeza del animal), la cual proporciona un periodo corto de inconsciencia antes de que los animales recuperen la consciencia (EFSA, 2004), el CO2 ofrece la posibilidad de proporcionar un aturdimiento irreversible matando al animal y, por lo tanto, evitando cualquier tipo de recuperación.
Además, en otras especies, se ha visto una mejora en la calidad de la canal (menor presencia de hematomas) y de la carne (menor presencia de carnes exudativas, PSE) cuando se ha pasado de la electronarcosis al aturdimiento con gases (Velarde et al., 2000).
Sin embargo, el CO2 no está permitido para el aturdimiento de conejos destinados al consumo humano en el mencionado Reglamento (CE) 1099/2009, aunque se deja abierta una puerta a que puedan introducirse nuevos sistemas de aturdimiento si se demuestra que garantizan el mismo (o superior) nivel de bienestar que los existentes mediante estudios de investigación que deberán ser evaluados por la EFSA.
En las siguientes páginas presentamos un estudio financiado por Intercún, que se diseñó en base a las guías de la EFSA (EFSA 2013) para que el CO2 se considerara por ésta como una alternativa viable en el aturdimiento de conejos.
MATERIAL & MÉTODOS
El estudio se dividió en tres fases en base a los tres objetivos principales del mismo:
- Evaluar la aversión durante la exposición a concentraciones del 70 %, 80 %, 90 % y 98 % de CO2 en aire atmosférico
- Evaluar la efectividad y duración del aturdimiento sin degollado
- Evaluar la efectividad del aturdimiento con dos intervalos aturdimiento-degollado: uno medio, de 70 segundos, y uno largo, de 120 segundos
Todas las fases se realizaron en el matadero experimental de IRTA en Monells, que está equipado con un sistema de aturdimiento con CO2, formado por un pozo donde se contiene el gas y una jaula que baja y sube a través de este pozo para someter a los animales a las concentraciones de gas elegidas.
En total se utilizaron 502 conejos provenientes de granjas comerciales de dos categorías comerciales: pesados (alrededor de 2,4 kg) y ligeros (alrededor de 1,8 kg); en una proporción de 70 % y 30 %. Los animales fueron expuestos a los diferentes tratamientos en parejas, colocados uno delante del otro para evitar estrés por aislamiento del grupo.
En la fase 2 y fase 3 , en uno de los animales de cada pareja se registró la actividad cerebral antes, durante y después de la exposición al gas mediante electrodos que permitían realizar un electroencefalograma (EEG).
En el otro animal de la pareja se evaluaron reflejos fisiológicos, como la presencia de ritmo respiratorio (indicador de animal consciente) y la presencia de reflejo corneal (el animal cierra el ojo cuando se toca la córnea) (EFSA, 2013).
RESULTADOS & DISCUSIÓN
FASE 1: ESTUDIO DE AVERSIÓN
- Al compararse el comportamiento de los animales durante una primera bajada (pozo sin gas) con el comportamiento durante la segunda bajada, en la que el pozo contenía ya el gas a las diferentes concentraciones estudiadas (70% CO2, 80% CO2, 90% CO2 y 98% CO2), se observó que el uso de cualquiera de las cuatro concentraciones de gas producía:
- Más movimientos de la cabeza (indicadores de molestia nasal)
- Vocalizaciones que el uso de aire atmosférico, confirmando que el CO2 es un gas aversivo
- No hubo diferencias significativas entre tratamientos (concentraciones del gas) en el porcentaje de animales que mostraron vocalizaciones y pérdida de postura, pero se observó un mayor porcentaje de molestias nasales en el tratamiento 90% CO2 respecto al 70% CO2.
- Por otro lado, la pérdida de postura se produjo antes cuando los animales fueron expuestos a 90% CO2 y 98% CO2 en comparación a 70% CO2 y 80% CO2.
- Además, el tiempo entre la aparición de los primeros signos de aversión (molestias de los animales al gas) y la pérdida de la postura (primer signo de inconsciencia) fue menor en 90% CO2 que en el resto de tratamientos (15 segundos en total).
FASE 2: EFECTIVIDAD DEL ATURDIMIENTO SIN DEGOLLADO POSTERIOR
- En relación a los reflejos fisiológicos (presencia de reflejo corneal o ritmo respiratorio; EFSA, 2013), se puede confirmar que todos los animales estaban bien aturdidos al final de la exposición, ya que en ningún tratamiento se observaron animales con signos de consciencia.
- La actividad cerebral medida con EEG confirmó que la pérdida de postura es un buen indicador del inicio de la inconsciencia en conejos expuestos a CO2, apareciendo antes cuanto más alta era la concentración de CO2 (casos de 90% CO2 y 98% CO2), con tiempos de pérdida de la postura alrededor de los 23 segundos en ambos casos.
- Además, los resultados del EEG también sirvieron para confirmar la capacidad del sistema para producir un aturdimiento irreversible, ya que de los 142 animales evaluados con EEG, 93 murieron y solo 29 recuperaron la consciencia (12 en 70% CO2, 15 en 80% CO2, 17 en 90% CO2 y 5 en 98% CO2).
- El tiempo en aparecer el ritmo respiratorio (primer signo de recuperación) y el reflejo corneal desde el final de la exposición al gas fue menor en 70% CO2 que en todos los otros tratamientos con gas.
- Así pues, la duración de la inconsciencia está relacionada con las concentraciones de CO2, con lo que mayores concentraciones de CO2 provocan inconsciencia de forma más rápida y más duradera que concentraciones más bajas.
En esta fase se decidió descartar el tratamiento 70% CO2 porqué se necesitaba demasiado tiempo (más de 7 minutos) en asegurar la muerte y no recuperación de todos los animales.
FASE 3: EFECTIVIDAD DEL ATURDIMIENTO CON DEGOLLADO POSTERIOR
- En el caso de un aturdimiento-degollado de 120 segundos, todos los animales expuestos a 80% CO2 durante 200 segundos murieron.
- En el 90% CO2, se evaluaron dos tiempos de exposición (130 segundos y 150 segundos), en el primero murieron un 93%, que nunca mostraron ningún signo de consciencia, y en el segundo murieron el 100%.
- Finalmente, con el tratamiento 98% CO2 se estableció un tiempo de exposición de 110 segundos y murieron también el 100 %.
También se realizó otra prueba con 90% CO2, pero esta vez con un intervalo aturdimiento-degollado de 70 segundos. A excepción de 2 animales, que mostraron de 2 y 4 movimientos respiratorios después del final de la exposición, no se vio ningún signo de recuperación en estos animales antes de su muerte.
- Los resultados muestran que la inhalación de altas concentraciones de CO2 resulta aversiva para los conejos.
- Los animales muestran los primeros signos de aversión a los 8-10 segundos del inicio de la exposición y muestran los primeros signos de inconsciencia a los 23-25 segundos (confirmados por EEG y pérdida de la postura).
- Con un intervalo aturdimiento-degollado de hasta 120 segundos, se recomiendan 200 segundos de exposición con 80% CO2, 150 segundos con 90% CO2 y 110 segundos con 98% CO2.
- En caso de un intervalo aturdimientodegollado de hasta 70 segundos, el tiempo de exposición con 90% CO2 se puede reducir a 110 segundos, pero teniendo en cuenta que si el aturdimiento es reversible, se debe comprobar la calidad del desangrado de forma regular.
Así pues, para plantear la exposición a altas concentraciones de dióxido de carbono como una alternativa a los sistemas existentes en relación al bienestar animal, deben confrontarse sus ventajas (ausencia de manejo de los animales desde su llegada al matadero hasta su muerte, sacrificio en grupo, aturdimiento irreversible sin posibilidad de recuperación de los animales ante ninguna circunstancia) frente a sus inconvenientes (el gas es claramente aversivo los 15 segundos previos al inicio de la inconsciencia).