Es preciso llevar una correcta gestión técnica en las granjas cunícolas para saber dónde estamos y para poder determinar los puntos críticos donde podemos mejorar en nuestro negocio. La gestión técnica se puede realizar, o bien de forma externa, a través de una empresa, o bien podemos hacerla nosotros mismos si sabemos cómo.
Para hacer la gestión técnica de la granja de forma externa, existen grupos ya establecidos como BdCuni, cuyo valor añadido es la posibilidad de comparar el funcionamiento técnico de nuestra granja con otras para conocer nuestra situación, comparativamente hablando. Evidentemente, esto supone un coste económico.
En este artículo nos centraremos en explicar cómo realizar la gestión de la granja nosotros mismos de forma sencilla. Basta con recoger los datos que aportan de forma rápida la información, aunque tendremos el hándicap de carecer de los resultados comparativos de otras granjas, perdiendo así la visión general del entorno cunícola.
Los datos deben recogerse en una ficha de lote. Actualmente se realizan por bandas, pudiendo hacer el seguimiento del ciclo completo, aportando toda la información global y continua. De esta manera podemos identificar los problemas en cualquier fase del periodo: lactación, reproductoras, cebo. De este modo se simplifica la búsqueda de causas que predisponen a la aparición de problemas en las explotaciones.
Con una ficha de lote al día podemos identificar los problemas en cualquier fase del período
Los datos importantes que debemos recopilar por banda son:
- Número de inseminaciones o cubriciones realizadas
- Número de partos totales
- Número de nacidos totales y vivos
- Gazapos destetados
- Gazapos vendidos
- Kg de carne vendida
- Kg de pienso consumido en el periodo
Con ellos ya podemos realizar una gestión técnica muy completa que nos aporta mucha información básica de cómo estamos funcionando. Esta se puede completar más detenidamente recogiendo más información, pero para empezar con esta tenemos más que suficiente.
Número de conejas
Suma de conejas inseminadas en el ciclo o suma de jaulas con reproductoras más conejas en jaulas de gestación
Es importante saber cuántas conejas tenemos trabajando en la granja. No es una información fundamental, sino orientativa. El número de conejas corresponde a la suma de todas las conejas que tenemos en nuestra explotación, entendiendo por coneja todo aquel animal que ha estado cubierto o inseminado al menos una vez.
En granjas con banda única o con múltiples bandas únicas el cálculo es muy sencillo, simplemente se suman las inseminaciones realizadas. De lo contrario, sumamos las jaulas con una reproductora dentro y le añadimos las reproductoras que están en jaulas de gestación.
No tiene demasiada importancia un error de pocas conejas, pues el patrón coneja para los cálculos ya no tiene la importancia que anteriormente se le concedía.
Fertilidad apreciada
% Fertilidad apreciada = Palpaciones positivas x 100 / palpaciones totales
Conocida habitualmente como palpación o diagnóstico de gestación. Es otro parámetro que, pese a su importancia, empieza a estar desvirtuado debido a los cambios de manejo. La palpación se realizaba anteriormente alrededor de los 12-15 días de gestación, pero actualmente es muy frecuente realizarla prácticamente en el parto, unos cinco días antes para ver a qué conejas hay que colocar nidal y a cuáles no. Esto hace que la comparación entre explotaciones diferentes tenga muchos sesgos y dificulte la equiparación.
Si se realiza dentro del periodo estándar (12-15 días de gestación) nos aporta mucha información. De lo contrario, hay que matizar siempre los resultados obtenidos.
Fertilidad real
% Fertilidad real o partos/cubrición= número de partos totales x 100 / número de inseminaciones
También conocida como tasa de partos o partos por cubrición. Este es un parámetro básico que nos indica el funcionamiento reproductivo real de nuestra explotación. En él debemos entrar todo parto que ha tenido lugar en la banda o lote, aunque por descuido o error la reproductora haya parido en jaula de gestación.
Con él conoceremos la situación reproductiva y podremos determinar a qué se deben los problemas si los hay: falta o insuficiente reposición, perdonar demasiado a las conejas, mortalidad de reproductoras, estado sanitario, instalación (luz), falta de confort ambiental (frío, calor, corrientes de aire…), alimentación insuficiente, manejo de la inseminación (aplicación, inducción ovulación), etc.
Prolificidad
Los nacidos vivos por parto es un parámetro importante que, complementado, con el de totales, nos permite conocer la mortinatalidad o nacidos muertos al parto.
A menudo los nacidos muertos engloba como concepto a los muertos y los no viables. Para ello es aconsejable conceptuar a los nacidos vivos como gazapos que han nacido vivos y viables, dejando los no viables y los muertos en el otro grupo.
Con los nacidos totales y los vivos por parto obtenemos, junto con la fertilidad real, el funcionamiento reproductivo de la coneja.
Si encontramos grandes diferencias entre ellos, que nos lo marcará la mortinatalidad (porcentaje de gazapos muertos y no viables que ha habido en el parto), nos indicará que habremos de prestar especial atención al manejo del parto, el estado cárnico y sanitario de las conejas y verificar si ha habido situaciones de estrés (por ejemplo, motivadas por vacunaciones en periodos tardíos de gestación o utilización de desparasitadores).
Mortalidad en lactancia
% Mortalidad gazapos lactación = (gazapos nacidos vivos – gazapos destetados) x 100 /gazapos nacidos vivos
Parámetro de gran importancia y en el que generalmente se pierden muchos gazapos, a menudo sin que nos demos cuenta. Es frecuente que no coincidan las bajas encontradas con las bajas reales que ha habido en el periodo de lactación. Este corresponde al periodo comprendido desde el nacimiento hasta el destete o los 35 días de vida (hay que tener en cuenta este dato en granjas con manejo a 49, 56 ó más días de ciclo, que pasan a ser cebo aunque estén con la madre), por lo que no se recomienda utilizar las bajas encontradas para calcular el parámetro.
La mortalidad en lactancia es clave, ya que generalmente se pierden muchos gazapos sin que nos demos cuenta
Mortalidad en engorde
Este parámetro es el más utilizado por ser uno de los periodos críticos en cuanto a patologías en las granjas. Es muy importante vincularlo a la mortalidad en lactancia para determinar el origen de los problemas sanitarios, ya que a menudo tienen su origen en ese periodo. Abarca desde los 35 días de vida o el destete hasta la venta.
% Mortalidad en cebo = bajas encontradas x 100 / gazapos destetados
% Mortalidad en cebo = ((gazapos vendidos + gazapos reposición + saldos) – gazapos destetados) x 100 / gazapos destetados
Hay dos formas de calcularlo: teniendo en cuenta las bajas encontradas o los gazapos vendidos. Las dos son bastante similares, pues es difícil que desaparezcan animales muertos en estas edades. Solo hay que tener en cuenta si nos dejamos animales para reposición.
La mortalidad en engorde nos habla de posibles patologías.
La presencia de saldos también altera el resultado, por lo que deben tenerse en cuenta. En general, los saldos no se tienen en cuenta nunca para los cálculos, lo que induce a error.
Gazapos y kilos vendidos por IA
Estos parámetros son los que en se están usando más ampliamente en la actualidad como referencia de buen o mal funcionamiento de la granja. Indican de forma global el resultado final, sin apreciar donde están los puntos clave de nuestra explotación para mejorar.
Gazapos y kilos vendidos por coneja
Actualmente este parámetro está perdiendo mucha importancia técnica de forma injustificada, pues también aporta información válida siempre y cuando se tenga en cuenta que hay que trasladar siempre el resultado al año. Por ello sólo se calcula en periodos anuales, de otra forma habría que hacer proyecciones.
Índice de Conversión
El índice de conversión por cada lote es difícil de calcular de forma exacta, pues se realiza generalmente por periodos anuales. Nos dará una aproximación a los costes globales de la instalación, ya que el coste de alimentación es, sin duda, el que más importancia tiene en los costes globales. Si se quiere hacer por lote, debe calcularse de forma aproximada el pienso consumido durante el lote.
IC = kg de pienso consumidos en un periodo / kg de conejo joven vendidos en el periodo
El índice de conversión se calcula generalmente por período anual es clave para saber la rentabilidad de nuestra explotación.