Cuando se inauguró el nuevo centro de selección de la línia HYLA en 2006-2007, EUROLAP, una sociedad francesa especializada en genética cunícola, diseñó el centro para producir en la medida de lo posible conejos con el uso mínimo de antibióticos.
Gracias a ello se puede afirmar hoy en día que el centro de selección después de 9 años en funcionamiento sigue alimentando sus animales desde sus inicios con el 100% de los piensos consumidos con piensos blancos, es decir, libres de antibióticos.
La utilización de alimentos blancos en las granjas de conejos es sin ninguna duda, una posibilidad real cuando se implican en un enfoque global basado en tres grandes ejes:
El 100% de los piensos consumidos son piensos blancos, libres de antibióticos
1er Eje – Bioseguridad
La instalación es una área cerrada que dispone de numerosos controles para controlar la entrada de las personas, del agua, aire y del material. Las personas que entran en la granja se tienen que duchar y vestirse con trajes de trabajo exclusivos de la instalación y diseñados para poder trabajar correctamente
El agua está clorada y acidificada para eliminar todas las bacterias potencialmente presentes y el aire se filtra para evitar la entrada de materiales no deseados.
En cuanto al material, la entrada de este se limita al estrictamente necesario y se procede a desinfectarse previamente a la entrada en una sala diseñada para ello. La instalación está logicamente diseñada para prevenir la entrada de alimañas (roedores, depredadores, etc) que son vectores reconocidos de bacterias patógenas, parásitos y virus.
Por ello es esencial que ningún animal del exterior entre en la instalación. La instauración de un programa de control para evitar esto, nos a segura una protección suplementaria adicional.
Para los trabajadores además se ha instaurado un procedimiento preventivo basado en lavarse las manos con regularidad durante todo el día. Evita la contaminación de los animales así como la presencia de pediluvios renovados regularmente en las comunicaciones entre las diferentes salas de la granja.
Por último, y muy importante, la aplicación del principio Caminar hacia adelante permite el diseño de una seguridad sanitaria suplementaria: realizar el trabajo diario desde las zonas limpias hacia las zonas sucias y nunca al revés.
A nivel práctico en la instalación se comienza por la maternidad antes de revisar el engorde, es decir, la maternidad es el punto de partida del trabajo diario protegiendo primero y siguiendo el curso de los animales.
La aplicación del principio Caminar hacia adelante permite realizar el trabajo diario desde las zonas limpias hacia las zonas sucias,
nunca al revés
Estas normas de bioseguridad permiten evitar la entrada de contaminaciones y es el principio de Caminar hacia adelante que permite anticiparse a los problemas y evitar las contaminaciones cruzadas.
Esta es la base que permite mantener un grupo de animales sanos alimentados con piensos sin antibióticos ya que los tratamientos preventivos sistemáticos no son necesarios.
2º Eje – Gestión técnica
Una vez que tenemos la bioseguridad asegurada, la gestión técnica debe ser precisa y fina.
El ritmo a 42 días (6 semanas) en todo dentro/todo fuera permite instalar las reproductoras que van a parir en las mejores condiciones sanitarias en una sala limpia y desinfectada.
La desinfección regular en este manejo evita la proliferación de patógenos y la contaminación de los animales. En referencia a la ventilación esta debe adaptarse a las condiciones climáticas, al peso de los animales presentes en la sala y al tipo de animales.
La temperatura no es en ningún caso el único factor de reflexión. Hay otros factores importantes, hay que asegurarse de:
- Aporte de oxígeno suficiente a los animales
- No instaurar una velocidad de aire excesiva
- No renovar excesivamente el aire de los animales
- La temperatura deber ser confortable y de variaciones limitadas
Tanto la ventilación excesiva como la insuficiente puede provocar patologías respiratorias en los animales y especialmente en las reproductoras y este punto en concreto debe adaptarse convenientemente a cada tipo de instalación.
El último punto importante es la alimentación de los animales. Al trabajar con una alimentación 100% sin antibióticos es necesario un programa preciso de alimentación para la instalación.
La alimentación de las reproductoras
En maternidad es necesario definir un programa de alimentación que cubra las necesidades de la reproductora cuando están en el punto más alto de producción (pico de lactación) y limitar los aportes nutricionales cuando las necesidades disminuyen.
Una reproductura siempre tiene que tener el pienso a voluntad desde el parto hasta el destete de sus gazapos.
Desde el parto hasta cuando los gazapos tienen 27-28 días de vida se administra un alimento de maternidad que aporta todos los nutrientes esenciales y la energía necesaria para la producción lechera y el desarrollo de la siguiente gestación.
A continuación y después del pico de lactación, la producción lechera disminuye y la reproductora necesita menos energía, asi como sus gazapos comienzan a consumir pienso de forma importante.
En este momento se utiliza un pienso que se denomina peridestete que tiene más fibra y menos energía sin comprometer las necesidades de la reproductora y garantizar el buen arranque de los gazapos en la alimentación con piensos.
La alimentación del engorde
Los gazapos empiezan a consumir pienso hacia los 21-22 días. A partir de los 28 días se alimentan con el pienso de peridestete, más adecuado para los jovenes gazapos que ya empiezan a ingerir más pienso que leche.
Una vez se han destetado y para assegurar la alimentación con pienso blanco, es imprescindible el uso de la restricción alimentaria.
Un buen racionamiento permite ayudar a controlar los alimentos ingeridos por los gazapos y evitar los problemas digestivos así como controlar el índice de conversión. El nivel de la ingesta se adapta en todo momento en función del peso de los animales en el destete.
Se considera que se debe comenzar con un consumo de 70g de alimento por día y animal si el peso promedio del lote se encuentra entre 850 y 900g.
El estricto racionamiento es fundamental para un crecimiento controlado.
Después aumentamos 10g de pienso cada 50g de peso corporal medio suplementario. Cuando ya tenemos la ración establecida en inicio, se aplica un aumento diario de 3-4g por día en la ración diaria.
3er Eje – Estado sanitario
Por último y no menos importante, seguir ciertas reglas sanitarias aseguran la calidad global de los animales. Así podemos observar que la instauración de un programa vacunal estricto para combatir el virus de la mixomatosis y de la RHVD es necesario.
El 100% de los piensos consumidos son piensos blancos, libres de antibióticos
Evidentemente la ración se puede adaptar en función del crecimiento real de los animales si se controlan cada semana pesándolos y teniendo en cuenta el estado sanitario de los gazapos.
La alimentación de la reposición
La preparación de las futuras reproductoras es el paso más importante del manejo en la granja. Un crecimiento controlado de 20 gr/dia en la reposición en el periodo entre las 10 semanas de vida y la inseminación permiten la máxima expresión del potencial genético de los animales.
Para obtener este crecimiento es necesario un estricto racionamiento y testar mediante pesajes la evolución de los animales.
La gran mayoría de instalaciones cunícolas vacunan los animales siguiendo las recomendaciones prescritas por los veterinarios. Además los tratamientos antiparasitarios en cada ciclo permiten controlar los parásitos internos, que si bien no matan los animales, si debilitan el sistema inmunitario y los vuelven más susceptibles a diversas enfermedades.
La revisión sanitaria y eliminación de las reproductoras (tanto de hembras jóvenes como en producción) es la primera herramienta de gestión sanitaria de la granja. Toda hembra que presente signos clínicos en la granja de una enfermedad debe ser eliminada y descartada para la producción.
Es el respeto y el seguimiento estricto de estas reglas lo que permiten poder trabajar con pienso blanco en la granja de selección asegurando al mismo tiempo una calidad sanitaria de máxima calidad que permite a los reproductores expresar su potencial genético.
La revisión sanitaria y eliminación de las reproductoras es la primera herramienta de gestión sanitaria de la granja
