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Reproducción de los conejos «en jaulas» y la cecotrofia

Cecotrofia

Los conejos y toda la familia “Leporidae” son muy originales en su sistema de digestión. Los únicos que la tienen doble y por el exterior. Similar, aunque mejor, que la que hacen los rumiantes.

Precisan siempre, y absolutamente, el que consuman los cecotrofos en una segunda digestión, ya que son sorbidos directamente del ano cada día, de preferencia en el atardecer, aún noche o muy pronto por la mañana.

Hay muchas especies animales que consumen, por enfermedad o vicio, sus excrementos, denominado como “coprofagia”.

Esto no tiene absolutamente ninguna relación con la “cecotrofía” que es una forma original de evitar, la exclusiva comida de vegetales de zonas áridas.

CECOTROFIA
  1. Toman el alimento, y lo trituran con los dientes que son cuatro en el maxilar, y dos en la mandíbula. Trituran bien con los premolares y molares, como nosotros, no como los de la gran familia de los roedores que tienen asimismo solo dos dientes en el maxilar.
  2. Ensalivan bien con varias glándulas salivares.
  3. Pasan el bolo alimenticio por el esófago hacia el estómago, donde ya hay mucha acidificación (ph de 2,15) y enzimas digestivos. Aparte, de las secreciones de páncreas e hígado, que reciben más tarde.
  4. Una vez en el intestino delgado, (pH casi neutrro de 7,18) hasta la válvula ileocecal, muy básica para el funcionamiento del momento para producir cecotrofos o heces secas.
  5. Entra en el superciego donde tiene lugar la función de fermentación por enzimas y microflora (pH de 5.96), y a la vez de mezcla y semitrituración con su peristaltismo.
  6. El bolo ya entra en la parte del colon proximal, básico para avisar al conejo, de si es cecotrofo o heces, y momento de reabsorción del agua, (ph de 6,55) hasta el resto del colon, e incluso del recto, ya como cecotrofo, de forma arracimada y algo húmedo, gelatinoso es de nuevo ingerido, “chupando” es la mejor definición, y ya como su verdadero alimento.

Los conejos conocen el momento de si producen cecotrofos o heces secas, y los primeros van a la boca, aunque sin masticar y ya sufren una digestión considerada normal (dibujo inferior) y algunos quedan enteros en estómago, y siguen hasta que en el ciego se van transformando en las bolitas que cazadores y cunicultores conocen como “cagarrutas” que son las que caen al suelo, y que los conejos, siempre limpios, amontonan, cuando están “en libertad”.

Veamos la imagen de cómo son los cecotrofos (izquierda), y su composición, y comparación con las heces secas, y cambios:

CECOTROFO Y CAGARRUTA SECA

Hay que tener en cuenta que no son cifras exactas, ya que depende de lo consumido, de la hora del día y del tipo de investigación. Son cálculos matemáticos redondeados de los datos de Proto, V. y Yoshida. I.

El resultado, el que interesa, ya queda señalado. Como los aumentos de Proteína, incluso de composición más alta en aminoácidos indispensables, y algo en Hidrocarbonados, debido a la fermentación bacteriana, rebajando el nivel de fibra o celulosa que baja enormemente (del 51 % al 31 %).

Por ello, podemos afirmar que casi pasan de ser herbívoros, a ser omnívoros, ya que consumen un alimento obtenido por los cecotrofos, más que por hierbas, paja, heno y duros troncos y raíces.

Ya hemos comprobado que todos los conejos, por su evolución genética, muy distinta a la nuestra, tienen comportamientos y “gustos”, dicho en forma de quienes les “quieren proteger”, y reconocemos que son muy tímidos a los depredadores.

No quieren sol ya que, a pesar de muchas comparaciones, son casi de vida nocturna.

Según observaciones de Yardin, las conejas lactantes pasan:

Las “cosas etológicas” que vemos son muy distintas a las humanas. Puedo asegurar que ellas y ellos están mucho mejor en jaulas adecuadas, en altura entre techo y suelo. Nido adecuado, y espacio de reposo y buen manejo.

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