Los machos de líneas paternales son utilizados para mejorar el índice de conversión y la ganancia media diaria de los conejos durante el engorde, siendo claves para la sostenibilidad del sector.
A pesar de esta importancia, los trabajos enfocados en mejorar su potencial reproductivo son limitados.
Algunos estudios recientes han mostrado la importancia de un adecuado desarrollo previo a la madurez sexual como factor determinante en su futuro rendimiento reproductivo.