A partir de los 36 meses de edad se produce una reducción en la producción de espermatozoides La producción espermática de los conejos está influenciada por diversos factores, entre los que se debe destacar la raza, la edad, la alimentación y las condiciones ambientales (luz y temperatura, principalmente).
Uno de los primeros aspectos a tener en cuenta en los animales que se emplean como reproductores es que el volumen, la motilidad y la concentración espermática, el pH del semen y la líbido del animal varían con la edad.
De igual modo, la edad del macho influye en la capacidad fecundante de éste, debido principalmente a una reducción en la producción de espermatozoides como consecuencia de la caída en la secreción de testosterona que se produce a partir de los 36 meses de edad.
La edad del macho influye en la tasa de concepción y el tamaño de la camada
Asimismo, se ha observado que la tasa de concepción y el tamaño de camada aumentan también con la edad. Sin embargo, la cubrición con machos viejos da lugar a una disminución de la fertilidad frente a machos de 2 años de edad.
Normalmente, la primera vez que un macho presenta comportamiento de monta, alrededor de los 4 meses, no eyacula y, en caso de que lo haga, el semen no es apto para utilizarlo como componente de la mezcla heterospérmica con la que se realizarán las inseminaciones. Por lo general, aparecen porcentajes elevados de espermatozoides inmaduros y con anomalías morfológicas y baja movilidad.
Los saltos efectivos en razas de formato medio pueden iniciarse en torno a los 5-5,5 meses, mientras que en las de formato grande se van hasta los 7 meses de edad, obteniendo, por regla general, a partir del semen de animales con edades comprendidas entre los 5 y los 24 meses, los valores más altos de fertilidad y de prolificidad.
Los valores más altos de fertilidad y de prolificidad se obtienen en machos entre los 5 y 24 meses de edad
ESTUDIO
El estudio se realizó en el Centro de Inseminación Artificial (IA) Zapiños (Imagen 1), localizado en el municipio de Abegondo (A Coruña, España), destinado a la producción de dosis seminales de la estirpe Valenciana. Para ello, consta de machos terminales de la Línea R, machos terminales de color y machos de las líneas maternales Hiperprolífica (HH) y Longevo-Productiva (LP).
El citado Centro de IA tiene informatizadas las fichas individuales de vida sanitaria y reproductiva de cada uno de los machos. Así, todas las extracciones realizadas a un macho se guardan en su ficha, pudiéndose comprobar fácilmente su evolución y rendimiento.
De esta forma, en el periodo comprendido entre el 2 de enero de 2007 y el 31 de octubre de 2013, se analizaron un total de 188.128 eyaculados procedentes de 1.972 machos de la línea R de la estirpe Valenciana con una edad comprendida entre los 4 y los 38 meses. Para la obtención del semen, se utilizó el método más empleado actualmente, que consiste en el uso de una vagina artificial, que aporta una temperatura y presión adecuadas para favorecer la eyaculación del macho.
Para el revestimiento de la vagina se utiliza un preservativo de látex (sin substancias espermicidas). El espacio que queda entre el preservativo y la vagina se llena con agua destilada a 55ºC. En el fondo de la vagina se introduce un tubo de cristal o plástico, donde se deposita el eyaculado. Inicialmente, se llevó a cabo una excitación de los machos y, a continuación, se obtuvo el semen con ayuda de un maniquí.
Inmediatamente después, se observó la ausencia o presencia de gel, procediéndose a su retirada.
Valoración del eyaculado
Con el eyaculado obtenido se realizó una primera valoración macroscópica, observando el aspecto y midiendo el volumen de los eyaculados que presentaron un aspecto normal. Los eyaculados se diluyeron a la proporción 1:5 con el diluyente correspondiente y, a continuación, se realizó una segunda valoración, microscópica y subjetiva.
Así, se colocó una gota de semen diluido entre portaobjetos y cubreobjetos y se observó al microscopio bajo contraste de fases a 200×. Se cuantificó la concentración espermática como apta (baja, normal, alta y muy alta) y no apta (muy baja o nula); la motilidad espermática, como apta (>60%) y no apta (<60%); y la presencia de aglutinaciones, espermatozoides muertos, formas anormales, agua y suciedad.
Muestreo
Los animales se clasificaron en cuatro grupos en función de su edad al momento de la extracción: 4-10 meses; 11-17 meses; 18-24 meses y 25-38 meses. De esta forma, 66.285 muestras (35,2%) se englobaron dentro del grupo de extracciones obtenidas a partir de animales de 4-10 meses; 57.947 eyaculados (30,8%), de animales con edades comprendidas entre 11-17 meses; 38.737 extracciones (20,6%), de animales de 18-24 meses; y, 25.159 eyaculados (13,4%), de conejos con edad mayor a 24 meses (Tabla 1, página siguiente).
Tabla 1. Influencia de la edad sobre diversos par.metros seminales de conejos de la l.nea R de la estirpe Valenciana
MACHOS MÁS JÓVENES (4-10 MESES)
En el grupo de machos más jóvenes (4-10 meses), se obtuvieron eyaculados de baja calidad, en cuanto a eyaculados amarillos, con gel, orina, pasta, motilidad espermática, mayor contaminación (suciedad) y menor aptitud final, dato también observado por García et al. (2004). También se verificó un menor volumen medio en este grupo de edad, aunque, posiblemente por ese motivo, se obtuvo un mayor número de eyaculados con concentración apta (baja, normal, alta o muy alta).
Además, se observó, aunque no significativamente, un mayor porcentaje de eyaculados con presencia de agua, que se puede deber a que estos animales aún se encuentran en una fase de aprendizaje y adaptación al procedimiento de recogida de semen con vagina, rompiéndola. El valor más bajo de volumen medio se observó en el grupo de animales más jóvenes (4-10 meses), probablemente por su incompleto desarrollo sexual e inmadurez seminal.
EL GRUPO ETARIO DE 11-17 MESES
El grupo etario de 11-17 meses presentó eyaculados con un mayor volumen medio; un mayor porcentaje de eyaculados con concentración apta, con una mayor motilidad y un menor porcentaje de espermatozoides muertos, lo que concuerda con otros autores que comprobaron que la edad óptima se encuentra en torno a los 10-18 meses.
Hay que comentar que se detectó un mayor volumen medio en machos de 11-17 meses, disminuyendo luego a medida que aumentaba la edad, coincidiendo con lo observado por García et al., quienes comprobaron que los 15 meses es la edad a la cual se obtiene el volumen máximo por eyaculado, disminuyendo progresivamente a partir de esa edad.
MACHOS MAYOR EDAD
Por otro lado, los machos pertenecientes a los grupos con mayor edad (18-24 y 25-38 meses) presentaron significativamente un mayor porcentaje de eyaculados de aspecto normal, peor concentración y motilidad espermática, que indica que la motilidad espermática se ve afectada por la edad de los animales, disminuyendo cuando los animales superan los 2 años.
En el grupo de animales con edades comprendidas entre los 25-38 meses, se observó significativamente un mayor porcentaje de eyaculados con presencia de precipitados. Sin embargo, en general, presentaron buenas características en cuanto a aptitud, probablemente por la selección, adaptación y eliminación pertinente a lo largo del tiempo de aquellos machos que producen eyaculados de peor calidad.
Otro aspecto que puede influir en los resultados es la fuerte selección genética por la cual pasan las líneas paternales de conejos machos destinados a IA.
Los autores agradecen a Dña. Ana Fernández Prado, la colaboración prestada.
CONCLUSIONES
En animales más jóvenes los eyaculados son de baja calidad, con menos volumen medio y mayor calidad de agua La edad óptima se encuentra en torno a los 10 -18 meses A los 15 meses es la edad en la que se obtiene el mayor volumen de eyaculado La motilidad espermática disminuye cuando los animales superan los dos años