En el momento de escribir esta sección continúan las cotizaciones en la banda alta con precios casi podríamos decir históricos si contemplamos las cotizaciones de los últimos años.
Las perspectivas para este final de año no son malas ya que la producción sigue sin recuperarse del todo por el cierre o disminución de efectivos en las granjas de los últimos años que mantiene una tendencia estable hacia la falta de canales sin ser esta general y que varía enormemente cada semana.
[registrados]Los precios de venta de las canales en las grandes superficies finalmente han aumentado equilibrando un poco la presión del precio de la canal que estaba tensionando los márgenes por la poca flexibilidad que quedaba.
Aunque la diferencia del precio del kg conejo en supermercado frente al kg de conejo en la carnicería sigue siendo muy elevado, con diferencias superiores al 50% en los precios o incluso superiores.
La calidad de la presentación de la canal justifica una diferencia de precio junto con la amabilidad y la manipulación del carnicero en el contacto directo, pero la falta de canales ligeras está aumentando el abismo de precio entre ambos productos.
Esta dualidad donde el consumidor de carnicería quiere canales ligeras (canales de 1kg como máximo) a un precio barato entran en conflicto con la relación de costes/beneficio de las granjas, ya que vender el conejo a un peso inferior significa unos ingresos inferiores por el mismo conejo vivo, que en parte se recupera por las primas que se están pagando por el conejo ligero en las granjas.
El consumo de conejo sigue sin remontar en España aunque en esta ocasión da la sensación que es por la falta de canales para vender, ya que es frecuente ver los sábados por la tarde que no hay conejos en los lineales de los supermercados o muy pocas, que tampoco es positivo ya que el comprador cuando ve muy poco género tiene tendencia a rechazar.
A nivel europeo la tendencia es la misma que en España, remarcando el aumento de consumo en Portugal, mientras que en Francia la tendencia sigue siendo de clara disminución del consumo, igual que en España.
La exportación de canales de conejo vuelve a estar encima de la mesa como una posibilidad, aunque quizás no es el mejor momento para exportar canales, aunque si para plantear situaciones que puedan dar salida a las canales cuando en un momento dado sobren.
En cuanto a las pieles se aprecian movimientos con una ligera demanda que a nivel general parece que ya no son un coste para los mataderos, pero sin significancia económica.
Siempre es difícil pronosticar a medio plazo por las grandes volatilidades que tiene este sector, sin embargo las perspectivas para el año que viene son similares en términos generales a las de este año.
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