No es habitual que vaya dos veces a una granja para hacer un reportaje, pero si la ocasión se presta siempre es agradable volver a hablar de ilusiones y perspectivas con cunicultores que no solo apuestan por el sector, sino que lo viven con orgullo, ganas de aprender y mejorar.
En este caso visitamos la granja de la familia Rebelo en Touro, con Márcio Coutinho -hijo de cunicultores- que se encuentra al frente del negocio familiar.
En el año 2000 Márcio decidió volver a Portugal, tras haber estado trabajando en Alemania en una heladería, para continuar y ampliar el negocio familiar de cría de conejos. En 2011, construyó una nave equipada con todos los adelantos tecnológicos que en aquellos momentos estaban disponibles en el sector, apostando por un sector que ya mostraba signos de agotamiento.